Tribunal anula permiso para la piscina en Rincón. Pueblo y tortugas, celebran

La tortuga tenía razón.  El Tribunal de Primera Instancia anuló el permiso de construcción concedido al Condominio Sol y Playa en Rincón y ordenó la demolición de las estructuras ya concedidas y que se regresara el espacio a su estado natural.  

 

El Tribunal interpretó que el permiso era nulo por haber sido otorgado con una exclusión categórica, en lugar de una evaluación ambiental o declaración de impacto ambiental.

El Tribunal entendió que el proyecto de construir la piscina en ese lugar “ciertamente tenía un impacto ambiental significativo y no cumplía con los requisitos… para que la obra fuera considerada una exclusión categórica”.

El Tribunal no determinó si la construcción era o no en la zona marítimo terrestre - eso le corresponde al DRNA en un proceso que aún no termina. El Condominio ha anunciado que apelará la decisión. 

 

La Junta de Planificación ha celebrado esta victoria judicial. En comunicado de prensa, el Presidente de la Junta, Lcdo. Julio Lassús, resalta que

“este caso no lo llevó ningún grupo; este caso lo llevó la Junta de Planificación a partir de los hallazgos de sus auditores”.

Celebramos que la Junta haya cumplido con la labor que se le encomendó en la Ley de Permisos y que ya no sostenga, como hizo hace apenas dos años, que obtener un permiso significa que quien lo pidió está apto para tenerlo. Esperamos que esto sea indicio de una Junta más asertiva y valiente en la defensa de su ley y de los bienes públicos. 

 

Eso sí, la reacción de la Junta presenta una imagen incompleta de lo que ocurrió con la construcción. Omite el Presidente que la auditoría de su agencia inició por una querella de una persona - residente del Condominio - preocupada por la situación. Desconoce que fue la gente quien divisó, documentó y divulgó la presencia de una tortuga marina tratando de anidar en los predios. Ignora que el Pueblo en las calles y en las playas puso sus cuerpos para impedir que continuara la construcción que ahora el Tribunal reconoce como ilegal. Fueron esas personas las que lograron llamar y mantener la atención del País ante lo que reconocieron como una ocupación de las playas que nos pertenecen a todas las personas.

 

Desde Ayuda Legal Puerto Rico apostamos a la participación de las personas en los procesos decisionales confiadas en que son el mecanismo para alcanzar la justicia climática. El acceso, disfrute y protección de las costas y playas es pieza clave para enfrentar la crisis climática. 

Las playas son de la gente y ha sido la gente quien por décadas ha llevado la carga de protegerlas. Todo el crédito al Pueblo. 

Fotos cortesía de @ElUrbanista en Instagram

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